Alitas en adobo

Las alitas son quizás mi parte preferida del pollo. Su carne es jugosa y sabrosa. Además al freírlas, suelen quedar crujientes.

1 kg de alitas de pollo, 1 cabeza de ajos, 250 ml de vinagre de vino blanco, sal, 1 cucharada de orégano, 1 cucharada de cominos en grano, 3 cucharadas de pimentón dulce, 2 guindillas secas, 200 ml de agua, aceite de freír.

Cortar las alitas por la mitad. Desmenuzar los ajos y machacarlos. Poner el vinagre, el agua, la sal, el orégano, el comino, el pimentón y las guindillas en el vaso de una batidora y triturar durante 5 s. Añadir los ajos y remover bien.

En un bol poner las alitas y cubrirlas con el adobo. Dejar al menos 8 h en la nevera, removiendo las de vez en cuando. Corregir de sal.

En un perol poner el aceite a calentar a fuego fuerte. Cuando esté caliente, freír en él las alitas, procurando que nos queden crujientes. Sacarlas y escurrirlas en papel de cocina. Servir calientes.

Alitas al limón 2

Una de las carnes más usadas a nivel mundial es el pollo. De este, se puede usar prácticamente todo. Las alas es una parte con poca carne, pero especialmente sabrosa.

500 gr de alitas de pollo, 1 kg de limones, 200 ml de vino blanco, 6 dientes de ajo, perejil, orégano, sal, aceite de freír.

Partir las alitas en dos partes. machacar los ajos, cortar en juliana el perejil. Poner el vino, los ajos, el perejil, el orégano y la sal en un recipiente junto con las alitas. Exprimir los limones y añadirselo. Mezclar bien y dejar reposar 12 h.

Poner en una cacerola el aceite a fuego fuerte, y cuando esté caliente, freír en el las alitas. Escurrir después de sacar. Servir calientes.

También podemos prescindir de freírlas y hacerlas a la plancha. Están deliciosas.